FIRME DETERMINACIÓN DE VIVIR.
Para simplemente vivir de cualquier forma hasta que se acabe la cuerda no es
necesario una firme determinación
Pero para sobrevivir es esencial mantener la esperanza y el optimismo.
A veces no es fácil evitar que nos perjudiquen los comentarios imprudentes y
negativos.
Hay enfermedades que parecen dejarnos sin escapatoria y puede parecernos que
no podemos hacer nada por mejorar. Pero no hemos de rendirnos, ni tirar la toalla.
Es muy fácil rendirse o dejarse consumir por la autocompasión, frente a un
problema que los demás no pueden solucionar y de lo cual pretenden convencernos.
No hemos de sucumbir a los sentimientos e ideas de carácter negativo.
Puede que hasta nos llegue a sorprender nuestro aguante.
Hombres y mujeres han demostrado que pueden soportar, mejorar y llegar a
curarse ante problemas de salud difíciles y hasta considerados letales.
¿Cómo lo lograron?
Por su enorme determinación.
Decidámonos a no dejarnos derrotar en la lucha por la supervivencia.
Imaginémonos que somos soldados que tienen que superar muchos obstáculos
para escapar de un peligroso enemigo que quiere acabar definitivamente con nosotros y
además posee armas poderosas.
Pero aún no estamos perdidos pues poseemos recursos humanos cerca nuestro y
nuestras facultades mentales en estado de máxima alerta.
No queremos dejarnos atrapar por dos razones principales: -porque otros en esa
misma situación se han salvado y porque si nos entregamos , la humillación y tortura
nos hará sufrir una insoportable agonía.
Los soldados que pierden la vida con las botas puestas sufren menos que los
soldados que saben que serán capturados , torturados y después ejecutados.
En la vida no hay desafío imposible de afrontar. Y si bien es cierto que no
siempre se vencen todas las dificultades lo que se sabe con certeza es que los que no
luchan están irremediablemente perdidos.
Mientras que haya un atisbo de esperanza, y siempre lo hay, no debemos
rendirnos.
Por lo tanto no importa lo sombrío que sea el panorama. Siempre sería peor si
nos desesperamos. Siempre hay que mantener una actitud mental positiva.
Nunca debemos perder la esperanza, de al menos, encontrar mejoría.
Podemos encontrarnos con la grata sorpresa de un pronóstico equivocado o con
un descubrimiento inesperado que sea para nosotros un madero de salvación. Y si no
surgiera ninguna sorpresa al menos nuestra vida habrá seguido siendo un buen ejemplo
para los que tengan que imitarnos en algún momento en el futuro.
Queda perfectamente claro, se mire por donde se mire:
---que una postura inmovilista o cobarde es perjudicial.
---que tenemos que estar conscientes y ser selectivos para asociarnos con
personas equilibradas y optimistas, y luchadoras que no pierden fácilmente el interés de
buscar soluciones aunque parezca que no existe ninguna.
---que a todos nos han arrojado al mar y que los que no aprendamos a nadar nos
ahogaremos sin remedio.
---que hay cosas en la vida que nadie las puede hacer por nosotros.
---que la vida vale la pena. Y solo por ver amanecer un nuevo día, todo el
esfuerzo que se haga está justificado.
La vida es un misterio que el hombre no puede explicar plenamente.
¿Quién puede asegurar que mañana será nuestro último día?.
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